Para tener formas más interesantes a la hora de comer unas sencillas pechugas de pollo a la plancha podemos hacer una marinada, introducir la carne y dejar desde 30 minutos a toda una noche (cuanto más tiempo estén sumergidas en los sabores que queremos trasladar más sabrosas quedarán).
En este caso he utilizado salsa de soja pero podemos utilizar mostaza, naranja e incluso yogur y especias.
INGREDIENTES
- 600 gr de pechuga de pollo en filetes gruesos
- 70 ml de salsa de soja sin azúcar
- 1 diente de ajo
- 1 cebolla pequeña
- 2 cucharadas de AOVE
- 2 cucharadas de vino blanco
- 1 naranja
- Sal y pimienta
PREPARACIÓN
Partimos y picamos el diente de ajo y la cebolla y ponemos en la base de un recipiente hondo.
A continuación añadimos 70 ml de salsa de soja sin azúcar, 2 cucharadas de AOVE, 2 de vino blanco y el zumo de 1 naranja.
Salpimentamos al gusto, tapamos y metemos en la nevera 1 hora.
Ya sólo queda escurrir el pollo de la marinada y hacer a fuego medio en una plancha o sartén.
Yo haré la marinada y tras tener en la nevera durante la sesión de batch cooking lo voy a congelar. Siempre os comento que mi congelador tiene un botón de congelación ultrarápida (es bastante probable que el tuyo también, búscalo) que pulso unas horas antes de la sesión.
Con ello nos aseguramos que la congelación se va a realizar en el menor tiempo posible, por lo que el agua, al cristalizar, lo hará en secciones pequeñas que no romperán el músculo de la carne que estamos congelando.
Así conseguimos que el alimento que sacamos del congelador, una vez cocinado, no tenga nada que envidiar a un producto fresco. Haced la prueba y me contáis, ¿vale?