Es una receta que permite ser congelada así que se pueden duplicar cantidades perfectamente
INGREDIENTES:
- 600 gr de garbanzos cocidos
- 1 kg de tomate natural maduro
- AOVE, sal y pimienta
- Comino
- Curry
- Semillas de mostaza
- 1 puntita de bicarbonato
PREPARACIÓN
Lavamos y troceamos el kilo de tomates y echamos en una olla de base ancha junto con 2 cucharadas de AOVE.
Chup chup a fuego medio durante 30 minutos, aplastando de vez en cuando con una cuchara para que vayan soltando el agua.
Mientras tanto, en un mortero o molinillo de café molemos una cucharadita de semillas de mostaza y mezclamos con una cucharadita de comino y otra de curry.
Añadimos a los 30 minutos las especias y sal al gusto, (yo no echaré pimienta porque las semillas de mostaza ya pican) removemos bien, bajamos el fuego y chup chup 10 minutos más.
Pasamos por un pasapurés para dejar la salsa homogénea, añadimos un poco de bicarbonato para quitar la acidez del tomate y volvemos a echar a la olla junto a los garbanzos para que se cocinen conjuntamente a fuego medio bajo durante otros 10 minutos.
Hecho. Si duplicas cantidades recuerda conservarlas por separado, salvo que las vayas a consumir en dos días consecutivos.
Nosotros acompañaremos de arroz integral cocido. Lo congelaremos por separado, en recipientes aptos y respetando la cadena de frío.