Si ya en otras publicaciones os he hablado de recetas asiáticas con sabores que nos enamoran como el pollo al curry o el pollo al curry con piña, esta vez os traigo una opción que aúna la mantequilla de cacahuete y la salsa de soja, el pollo en salsa satay.
Este condimento para carnes o pescado se puede encontrar en diversos países de Asia como China, Indonesia o Malasia, en Holanda e incluso en Perú. A ver qué os parece esta opción que os muestro:
INGREDIENTES PARA EL POLLO
- 3 pechugas fileteadas de pollo
- 3 cucharadas de salsa de soja sin azúcar
- 1 cucharadita de jengibre fresco
- 2 dientes de ajo
- Aceite de Oliva Virgen Extra y sal
- 1 cucharada de zumo de limón
- 1 guindilla (opcional)
INGREDIENTES PARA LA SALSA SATAY
- 50 gramos cacahuetes (crudos o tostados, al gusto)
- 1/2 lata leche de coco (unos 200 ml)
- 100 ml de agua
- 3 cucharadas curry en polvo
- 1/2 cucharadita canela
- Un manojo de cilantro (yo no le pongo porque no nos va mucho su sabor)
- 1 cebolla
- 1 lima (en sustitución de la hierba limón o lemongrass)
- 1 limón
- Aceite de Oliva Virgen Extra
PREPARACIÓN
Para comenzar con nuestra receta de pollo en salsa satay laminamos 2 dientes de ajo y mezclamos con 3 cucharadas de salsa de soja, 1 cucharadita de jengibre rallado, 1 cucharada de aceite, 1 cucharada de zumo de limón, 1 guindilla y sal al gusto.
Marinamos la carne con este preparado, tapamos y reservamos en la nevera durante, al menos, 1 hora.
Picamos 1 cebolla y la sofreímos en una sartén de base ancha con un poco de aceite y a fuego medio para que no se nos dore en exceso.
Continuamos elaborando ahora la salsa: En el vaso de un procesador de alimentos trituramos 50 gr de cacahuetes pelados junto con el resto de los ingredientes de la salsa: 200 ml de leche de coco, 3 cucharadas de curry, 1/2 cucharadita de canela, un manojo de cilantro picado, la ralladura de una lima y el zumo de medio limón.
Disponemos la salsa en un cazo, añadimos la cebolla rehogada y llevamos a ebullición, bajamos el fuego y chup chup durante 10 minutos.
Mientras que las salsa se está haciendo doramos las pechugas con un poco de aceite en la sartén donde habíamos pochado la cebolla.
Ya sólo nos falta mezclar esta carne con la salsa y tendremos nuestro pollo en salsa satay listo para hincarle el diente. Nosotros lo acompañaremos de cus cus aliñado con aceite, sal y limón, ¿y tú?
